A partir del día 1 de julio entra en vigor el nuevo Código Penal, que introduce importantes novedades en lo que se refiere a reptiles y anfibios. La nueva redacción introduce el concepto de “posesión” de individuos de especies de fauna silvestre  protegidas por la ley española, contraviniendo las leyes u otras disposiciones de caracter general. Lo que hasta ahora era una infracción administrativa que se saldaba con una multa, pasa a ser un delito que debe ser juzgado, con penas de multa o prisión, tal como ha publicado el Boletín Oficial del Estado. Las especies afectadas son las incluidas en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y Catálogo Español de Especies Amenazadas.

También se amplían los supuestos de maltrato animal, incluyendo animales domésticos o amansados, habitualmente domesticados, que viven bajo control humano y cualquiera que no viva en estado salvaje.

Quedamos a la espera de ver como se aplican estos cambios y la jurisprudencia que se genere.

Los animales documentados, ya sea con CITES o permiso de la administración si pueden poseerse.

Galápago leproso, una de las especies afectadas por el nuevo código penal.